Observatorio de Política Migratoria y Derechos Humanos

CIUDAD NEILY —Más de un centenar de migrantes deportados a Costa Rica por el Gobierno del republicano Donald Trump, algunos originarios de países que Estados Unidos considera una amenaza y con regímenes hostiles como Rusia, Afganistán y China, llevan más de un mes atrapados en un albergue de ese país centroamericano, apretujados en camarotes compartidos y sin apenas ventilación en una región húmeda que suele superar los 90 grados Fahrenheit.

[…]Encontramos a familias enteras, personas sonrientes a veces, pero angustiadas por su situación, según relatan, algunas desesperadas tratando de comunicarse con los periodistas a través del traductor de Google porque no hablan inglés ni español. Hay 20 niños; varios se veían este lunes alegres, con ropa ligera y sandalias y un cartel que decía: “Ayúdennos a regresar a Estados Unidos”. Un niña gritaba a los periodistas: “¡America, America!”.